La Asociación del Personal de la Universidad Nacional de Mar del Plata (APU) reclama el “inmediato recupero” de los salarios para ganarle a la inflación. El gremio se declaró en estado de alerta: "Vemos crecer el malestar entre las y los trabajadores".
La Asociación del Personal de la Universidad Nacional de Mar del Plata (APU) reclama el “inmediato recupero” de los salarios de las y los trabajadores del sector.
Este martes se realizará en la sede del Ministerio de Educación de la Nación la paritaria nacional para el tratamiento de la pauta salarial 2021 en el sector universitario nacional, que contempla a trabajadores docentes y no docentes.
El actual acuerdo paritario, comunicaron desde APU, “lleva dos meses vencido” y “vemos crecer el malestar entre las y los trabajadores” de la Universidad ante “la incertidumbre por una propuesta salarial acorde a los objetivos planteados por el gobierno de que los salarios superen este año a la inflación”.
Ante esto, la comisión directiva del gremio reafirmó la necesidad de recuperar el poder adquisitivo perdido producto de la inflación acumulada de los últimos años y las perspectivas inflacionarias para el 2021.
Los trabajadores reclaman el “recupero inmediato” de sus salarios, aumentos escalonados, cláusulas gatillo a lo largo del año que “aseguren que la inflación no le gane al salario”, efectivizar la mayor parte de los aumentos de tal forma que tengan impacto en el aguinaldo de mitad de año y también “reforzar el poder adquisitivo de las categorías con menores salarios” en función de la “emergencia salaria” que atraviesa el sector.
Ante esta situación y a la espera de la negociación salarial de este martes, el gremio comunicó que se mantiene en estado de alerta.
“No nos es ajena la gravísima situación sanitaria y económica que atravesamos y valoramos los esfuerzos del gobierno nacional ante la especulación que realiza con la vida de millones de argentinos una oposición irresponsable fogoneada por los grandes medios de comunicación”, expresaron.
Asimismo, destacaron que para que la universidad pública continúe siendo sinónimo de inclusión y calidad “debemos resolver sin más demoras la situación salarial de 200 mil trabajadoras y trabajadores”, ya que “sin sueldos dignos no hay producción posible, no se reactiva la economía y no se combate la pobreza”.